Rodando una cardioide...
Esta es una de las muchas pruebas que seguiré haciendo para encontrar la forma que debe tener el borde tanto de la cardioide como de la cicloide para que la primera ruede, sin deslizamiento sobre la segunda.
Ya al menos he encontrado las curvas paralelas a ambas curvas (tanto interiores como exteriores).
Por ahora sólo se muestran los rastros de unos burdos dientes que, como no podia ser de otra forma, dejan trayectorias de evolutas.